PEKIN/BEIJING - CHINA - 3/3

Tengo que confesarlo, uno de los objetivos de mi viaje a China era probar los alacranes, me mataba la curiosidad, me habían dicho que saben a gambas pero muy a mi pesar, no los encontré...que pena!!! y mira que los buscamos, hay un mercado en la calle especializado en bicherío variado, pero mi grupo de amigos no estaba tan emocionado como yo por probarlos.Lo que seguro no hubiera probado era la carne de perro, pero por suerte parece que esa costumbre está de capa caída.

De paseo por la ciudad nos encontramos con un español, su hija arquitecta se había venido a trabajar a Pekin, así que nos orientó sobre donde ir a cenar, queríamos un sitio que no fuese para extranjeros y que estuviera correcto, y fué un acierto.

Para empezar pedimos unas habitas verdes, que guisan en su vaina, te las comes como si fueran pipas, se pronuncia "mautou", no me dió tiempo a hacerles la foto...volaron!

A la vista estaba un pequeño mostrador con uno de los entrantes que más les gustan a los chinos...si, son garritas de pollo!!!....ayssss, hasta a mí me da grima, en este momento no me atreví a probarlas, pero más adelante si lo haría, ya os contaré...





Garritas de pollo

Y junto a ellas estaban estas cabecitas de pato, que también les apasionan, pero no...tampoco me motivaban mucho. Cierto, lo que estás pensando es cierto...estos chinos se lo comen todo!!!

Cabezas de pato

La cerveza como siempre...tibia, por suerte la carta estaba llena de fotos y empezamos a pedir a ojo, en la mayoría de los casos sin saber exactamente que era, pero que más da??? Pedimos una especie de arroz tres delicias o X delicias, a saber!! y os aseguro que estaba buenísimo. El arroz en China es un valor seguro, llevan unos poquitos de años cocinándolo.



Arroz X delicias



Y como no solo de arroz vive el hombre, ese plato de gambas o langostinos fritos con...si...con más cosas que no sabíamos, sería el siguiente, y hay que decir que picante llevaba, acabamos deduciendo que el culpable era un pimiento rojo que estaba repartido por todo el plato, pero merecía la pena, muy bueno!!

Gambitas fritas



Y como anécdota de la noche, mientras cenabamos, apareció una morena con un Ferrari, allá que se subió en la acera y estuvo unos quince minutos retocándose el maquillaje. Por Pekín pasean los coches más espectaculares que he visto en mi vida, y si os fijáis en el de la foto...no lleva matrícula!!...y no era este en particular, y es que allí los que tienen dinero parece que tienen derecho a quebrantar todas las prohibiciones, y claro, sin matrícula...como te ponen la multa?? tela!!



China cañón en Ferrari